.

Otro revés para el equipo rojillo que necesitaba una victoria como el agua pero el partido cambió completamente de planteamiento ya que Nando avisaba el Sábado por la tarde que no podría asistir debido a sus compromisos extrafutbolísticos.

Así pues el equipo acudiría al bonito pabellón de Bembrive con el objetivo de defender e intentar recibir los menores goles posibles. Los porteros salieron por sorteo: Alex y Richi en la primera mitad y Javi y Manu en la segunda.

El partido comenzó equilibrado. Ámbos equipos deseaban jugar al fútbol y el marcador se aguantó hasta mediada la primera mitad cuando en una contra, Dalimos marcaba el 0-1. Los Balancines siguieron jugando como podían intentando evitar más goles en contra y en un disparo casi sin intención, Richi hacía el 1-1 en el marcador, resultado con el que se llegaba al descanso.

Con la segunda parte, Dalimos salió encendido metiendo en poco tiempo el 1-2 y adelantándose en el marcador, cosa que acabó con la moral de Balance que veía que tal y como estaban las cosas iban a perder seguro.

Aún así se presionó bastante arriba pero en un error defensivo de los típicos de Balance, y esta vez sin Nando que lo solucionase, Dalimos se ponía 1-3. Ante una derrota inminente al equipo local no le quedó más que sacar la garra y el orgullo que llevan dentro consiguiendo acortar distancias tras un buen gol de Javi que en el último minuto erraría un doble penalty que pudo ser el empate.

La conclusión de este partido es que al Balance le falta el factor equipo porque calidad la tiene de sobra. También hay que tener en cuenta que el portero en fútbol sala es fundamental ya que se tiran muchas veces a puerta y la ausencia del mismo marca un partido.

*Pedir disculpas por lo escueto y tardío de esta crónica pero esta semana hemos estado algo liados y no hemos podido mantener el ritmo de la web que hubiesemos querido. Pronto actualizaremos todo.